domingo, 14 de noviembre de 2010

DESPUÉS, MÁS TARDE…


No te acongojes más por lo que has hecho;
Fango y espina tienen fuente y rosa.
William Shakespeare


Quieta y dormitando sobre un ovillo de sueños,

descansa después del último viaje.

Permitió que los sentimientos la tapiaran,

saltó charcos de plomo, cruzó rieles de fuego,

avanzó sobre filos de navajas,

respetó opiniones y sepultó certezas.

Como en comunión, creyó hasta caer en el aljibe de la mentira.

Olvidó caminos hechos para inaugurar picadas en la selva.

De lábaro libertario se transformó en bandera blanca vencida.

No hagas ruido, no la despiertes,

tal vez ese sopor la redima.

Después, más tarde,

acercáte despacio y poné tu mano en su lomo de gato virtual.

Hacé que tu sombra se acomode a la suya,

moldeá con caricias de luz sus tinieblas.

Enseñále a ser feliz,

contále de tu mundo e invitála a entrar en él.

Suspendé para siempre su fuga

ponéle tacos altos y una capelina de estrellas.

Alfombrá tu casa con plumas de gaviota.

Encendé un sahumerio de sándalo

y usá su boca de pebetero.

Me callo, está despertando.

y quiero dejarte a vos la tarea de abrirle los ojos a mi alma.

ALICIA CORA FERNÁNDEZ