sábado, 27 de agosto de 2011

AZOGUE


Se conocieron en la tienda de regalos,
cuando el calor de enero sudaba en los cristales.
Al mirarse cara a cara sonrieron a dúo.
Ella lo buscaba hace mucho
y cuando vio su traje marrón tabaco y la camisa brillosa,
supo que tenía que llevarlo a su casa.
El insomnio compartido se hizo hábito entre los dos.
Lo convirtió poco a poco en su confidente y asesor de vestuario.
Él trató de no engañarla nunca
y sus consejos fueron reglas de oro.

Aquel día, los ojos de ella estaban raros,
arrojaban chispas incendiarias en el cuarto creciente.
Le confió casi en un susurro que había conocido a alguien muy especial,
que creía estar enamorada y que la vida empezaba a sonreírle.
Excusas pensó él,
ya no la tengo atrapada en mí
su mirada se posó en otra que no es la que yo reflejo.
Lágrimas de mercurio se cuajaron en su luna.
El amor que se atrevía a mirarlo cara a cara ya no estaba.
Destino de espejo el suyo, de reflejo solamente,
ella puso el clavo y lo esclavizó a sus ojos.
Y ahora él, colgando de su soga de ahorcado sigue extrañándola.

ALICIA CORA FERNÁNDEZ

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Un poema muy fuerte como nos tenès acostumbrados. Me encantò, Alicia. Triste final, pero lleno de poesìa. Te felicito Baby

Anónimo dijo...

Aun no comprendo , esa virtud que tienes para relatar poemas que llegan tan hondo en el corazon, Me encanto , me alegra poder leer tus escritos y que brindes la posibilidad de leerlos beso Lia

abelespil dijo...

Las imágenes son exponentes de tu creatividad.
Nada te detiene .
Tus poemas llevan un claro signo y designio de tu devenir.
Se te filtra.No puedes amiga, evadirte del dolor que ha arribado en tus entrañas.
Lo cristalizas en poemas bellos.
Abel Espil

Prof. Mariana Derosa - Coordinadora de Informática dijo...

Divino mami. Aunque enamorada, sigo teniendo a mi espejo, lejos de abandonado, como mi "segundo admirador".
Te quiero

Anónimo dijo...

Alicia querida, muy impactante tu poema,eres sumamente creativa y van mis aplausos.
Te quiere y recuerda siempre
Abrazos y besos.
Raquel Luisa Teppich

Anónimo dijo...

Alicia: Tus poemas me transportan al relato. Me encantó Azogue. Besos Inés